En un contexto marcado por bloqueos y amenazas de radicalización de las protestas por parte de sectores afines a Evo Morales, la cuarta versión de la Cumbre interinstitucional y multipartidaria por la democracia se realizó este jueves, en Santa Cruz, con un objetivo común: blindar las elecciones generales del 17 de agosto.
La convocatoria del Tribunal Supremo Electoral (TSE), realizada con apenas 48 horas de anticipación, logró reunir a candidatos presidenciales, representantes del Legislativo, el Ejecutivo, el Órgano Judicial, la Fiscalía y organismos internacionales.
El presidente del TSE, Óscar Hassenteufel, destacó la respuesta “increíblemente positiva” de todos los actores. “Esto demuestra que hay voluntad nacional para garantizar que el pueblo boliviano vote y elija a sus nuevas autoridades el 17 de agosto”, afirmó.
Entre los asistentes estuvo Eduardo Del Castillo, candidato del MAS y exministro de Gobierno, quien remarcó la necesidad de frenar cualquier acción que ponga en riesgo el proceso electoral. “Todos coincidimos en que no se puede poner en riesgo las elecciones del 17 de agosto. Hay que garantizar la libre locomoción y sancionar a quienes estén cometiendo delitos en el marco de las protestas”, declaró.
Del Castillo celebró además que se haya retomado el control del municipio de Llallagua y que se haya desplegado un contingente de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) como parte de una estrategia para mantener el orden.
Samuel Doria Medina, candidato de la alianza Unidad, resaltó la diferencia clave de esta cumbre con las anteriores: “Ahora participaron parlamentarios que tienen mayoría, lo que garantiza que los acuerdos se cumplan en la Asamblea. Antes no se podía avanzar porque los compromisos no tenían peso legislativo”.
Desde la alianza Libertad y Democracia, Jorge Tuto Quiroga fue enfático en denunciar el impacto económico de los bloqueos: “El pollo cuesta más de 100 bolivianos, el aceite escasea y la verdura se pudre en el camino. Esto no puede seguir. Hay que garantizar que llegue el combustible y los alimentos a todos los rincones del país”.
Eva Copa, candidata de la alianza Morena y alcaldesa de El Alto, coincidió: “El pueblo lo que quiere es: carreteras expeditas, comida accesible y tranquilidad. Esta cumbre ha sido útil para escucharnos y hacer autocrítica. Pero también debemos ser firmes: hay normas y leyes que deben cumplirse, y nadie puede estar por encima de ellas”.
La exsenadora sugirió que Evo Morales está mal asesorado y pidió dar paso a una renovación política. “No es la única opción. Hay que dar oportunidad a nuevos actores y dejar de mirar de palco lo que está pasando. La justicia tiene que actuar”.
Jaime Dunn, economista que aún aspira a ser candidato a la presidencia, pidió responsabilidad fiscal en medio del debate: “Planteamos que cualquier crédito aprobado venga acompañado por una reducción del gasto corriente. No tuvimos apoyo en ese punto, pero lo importante es llegar a acuerdos y dar certidumbre”.
El presidente del TSE, Óscar Hassenteufel, evitó pronunciarse sobre la insistencia de Morales en ser habilitado como candidato, indicando que ese tema será tratado en sala plena. Sin embargo, ratificó que el 17 de agosto habrá elecciones y que el órgano electoral trabaja para garantizarlo.
El encuentro concluyó con la firma de un documento de 12 compromisos, entre ellos la aprobación de créditos para financiar el proceso electoral y la corresponsabilidad de todos los órganos del Estado para garantizar el desarrollo pacífico de los comicios.